Código Ético Cinegético
Últimamente estamos siendo muy criticados en todos los medios de comunicación, por lo que es muy importante definir bien el código ético y la conducta moral en la que nos movemos los cazadores. Nosotros los cazadores tenemos unos valores que tenemos que enseñar ya que el término muerte provoca una gran polémica.
La ética en la caza es muy importante y debemos transmitirla siempre y en todo momento, como el respeto a los animales, al campo y al medio ambiente.
Estas normas fundamentales de comportamiento son necesarias para sobrevivir y deben ser conocidas y enseñadas. Nunca debemos olvidar que somos juzgados por nuestro comportamiento y cualquier equivocación o mala acción produce un gran perjuicio en todo el colectivo.
Siempre debemos tener en cuenta el punto de vista de los demás y enseñarles que la caza es importante para mejorar las especies, para el medio ambiente y la naturaleza.
Normas éticas en el mundo cinegético
A continuación exponemos las Normas éticas. Un código ético cinegético que debemos cumplir y cuidar:
· Ser un cazador competente y responsable.
· Cumplir las leyes de la caza y exigir a los demás a que las cumplan.
· Llevar siempre toda la documentación que corresponda.
· Dar el apoyo que necesiten a las autoridades correspondientes.
· Respetar las limitaciones establecidas para el ejercicio de la caza.
· Respetar las especies objeto de caza, así como cualquier especie silvestre presente en los montes.
· Contribuir a la defensa de la vida salvaje y de la naturaleza y el uso sostenible de los recursos naturales.
· Procurar adquirir las mejores técnicas de caza y de tiro para asegurar el cobro rápido y seguro del animal, localizando a los animales heridos hasta que sea posible.
· Tener consideración con los demás.
· Anteponer siempre la seguridad de todos ante cualquier otra cosa, especialmente en el manejo de las armas y la seguridad en el tiro, identificando siempre nuestro objetivo.
· Tener el respeto que se merece la caza, el cazador, la propiedad privada y el medio ambiente.
· Acatar siempre las reglas de las diferentes modalidades de caza.
· Tener en cuenta que los resultados de la caza nunca se pueden garantizar pues están sujetos a muy distintas circunstancias.
· Administrar adecuadamente la caza, cumpliendo con los cupos de caza establecidos durante el desarrollo de la actividad.
· Seguir manteniendo los rituales de la caza y su entorno.
· Respetar y apreciar a los perros que son la base de muchas modalidades de caza.
· Ser consciente de su responsabilidad con un patrimonio común de la humanidad.
· Respetar el entorno natural en el que se desarrolla la actividad cinegética, evitando dejar residuos en el mismo.
· Ser responsable de sus actos y observar estrictamente las medidas de seguridad, antes, durante y después de la caza.
· Enseñar a los más jóvenes el sentido y el deber de este código ético y las habilidades para ser un verdadero cazador.
· Por último, y no menos importante, recordar que cantidad no es sinónimo de calidad.
La caza no es un juego, tenemos que tener presente que lo que hacemos tiene su eco en la eternidad.
¡¡Muchas gracias por leerme!!
¡Nos vemos en el próximo post! 😉
Pilar Escribano Reina