Hotel rural El Covaju
No me cansaré de decirlo, para mi el turismo rural no es algo nuevo, ni una moda pasajera. Siempre que busco una escapada de fin de semana intento descubrir sitios con paisajes de ensueño, con la mayor tranquilidad para poder refugiarme en plena naturaleza. De esta forma me aseguro un descanso total de la gran ciudad y sin privarme del confort y las comodidades que más me gustan.
Por eso en esta ocasión elegí el Hotel “El Covaju” situado en Cabezón de Liébana (Cantabria), rodeados de unas vistas espectaculares a los Picos de Europa. La localización de este hotel rural es paradisíaca y su inspiración en las antiguas aldeas montañesas nos regalaba el mejor de los descansos, como si de repente volviéramos al pasado y nos enmarcáramos en aquellos años en los que apenas había coches y estrés.
Hotel con encanto y repleto de comodidades
Las estancias del Covaju son amplias, con capacidad que van desde 2 a 10 personas, dependiendo de nuestras necesidades, lo que permite ir con tu familia, amigos o incluso para una escapada romántica en pareja. Cada uno de sus apartamentos tienen grandes ventanales desde donde se puede contemplar el esplendor y frondosidad de los montes cántabros, repletos de bosques de robles, hayas y encinas.
Para facilitarnos la estancia disponen de un aparcamiento amplio donde dejar el coche sin dificultad. Además si vas en temporada de verano podrás disfrutar de una gran piscina, barbacoa y una sauna con jacuzzi en el exterior. ¡Eso sí que es vida!
La gastronomía del norte es muy abundante y sus desayunos eran muy completos. No faltaban los dulces típicos de la zona como magdalenas, sobaos pasiegos, o la mantequilla de la tierra. ¡Riquísimos!
Su salón comedor, de corte tradicional, cuenta con paredes de piedra en sillería, decoradas con bellos trofeos de caza y unos ventanales desde donde poder disfrutar del bello entorno al mismo tiempo que degustamos una pitanza única de la montaña cántabra.
Sin duda el plato estrella es su cocido lebaniego. Especial mención a sus garbanzos pequeños y cremosos, su chorizo, tocino, cecina, jamón, verduras… Todos son productos de la tierra. En la carta también podrás encontrar embutidos de la zona, carnes rojas, lechazo, etc. Todos de primera calidad.
Para rematar su apetitosa carta, llegaron los postres, Ni que decir tiene que son caseros a la par que exquisitos. Arroz con leche, quesada, frisuelos de Liébana… Y como no un buen orujo, bebida típica por estos lares, no podía faltar al final para rebajar la copiosa comida.
Actividades en plena naturaleza
Fuera de El Covaju, además, nos esperaban un sinfín de actividades que se desarrollan en plena naturaleza, lo que me enamoró aún más del hotel. Disfrutamos de rutas 4×4 a través de la comarca de Liébana y el Parque Natural de Picos de Europa, gracias a los taxis de montaña que disponen. Excursiones a caballo, descenso de cañones o canoas, son otras de las actividades que ofrece el hotel para el disfrute de sus huéspedes. Una gran oferta outdoor para los visitantes más activos e intrépidos.
Pero si me tengo que quedar con algo que me cautivó profundamente es que es un hotel que también piensa en los cazadores. Además de tener decoración cinegética del lugar, pueden gestionar y organizar recechos de venado, rebeco y corzo en la Reserva Regional de Caza del Saja y la comarca de Liébana.
La RRC del Saja, es una de las más míticas de nuestra historia venatoria. Abarca desde el río Besaya hasta los Picos de Europa y desde el límite con Palencia hasta la sierra del Escudo de Cabuérniga. Comprende un área de más de 180.000 hectáreas y cubre más de un tercio de la Comunidad Autónoma cántabra. Mantiene un elevado grado de conservación que ha llevado a proteger más específicamente una amplia extensión de su territorio, así encontramos: los lugares de importancia comunitaria de río Deva, río Saja, río Deva, río Nansa, Sierra del Escudo de Cabuérniga, Valles altos del Nansa y Saja y Alto Campoo, río Camesa; cuatro ZEPA, el Parque Natural de Saja-Besaya y parte del Parque nacional de los Picos de Europa.
Dentro de este gran número de hectáreas protegidas y bien guardadas, podemos encontrar una rica y abundante fauna silvestre.
Sin duda, el rey de los Picos de Europa es el rebeco cantábrico, su presencia está en las zonas más altas y hace que su cacería sea más dificultosa. En las zonas más accesibles habita el corzo, venado, jabalíes y zorro, y numerosas especies protegidas en especial el oso pardo, lobo ibérico y el urogallo cantábrico.
Gracias a su privilegiada ubicación, El Covaju será una magnífica base de operaciones para quienes quieran disfrutar de la observación de la naturaleza y de la fauna en su hábitat natural.
Una época fantástica para ir a El Covaju es cuando empieza la berrea, es algo maravilloso y espectacular. Si tenéis la posibilidad de subir al límite de los términos de Bedoya y Polaciones podréis ver el Mar Cantábrico y escuchar al rey del bosque al mismo tiempo. ¡Es algo único!
No perdáis la oportunidad de conocer un rincón único como es la comarca de Liébana y aprovechar para descubrir el encanto que ofrece un lugar tan bucólico y natural como El Covaju, en donde reciben a los cazadores con los brazo abiertos.
Si queréis más información os dejo su contacto:
Barrio medio Aceñaba
39571- Cabezón de Liébana
(Cantabria)